Empezar una relación de pareja es un desafío emocionante que todos enfrentamos en algún momento de nuestras vidas. Es un viaje que nos enseña mucho sobre nosotros mismos y sobre cómo construimos y entendemos el amor. Sin embargo, dejando a un lado la romantización, también surge una serie de preguntas fundamentales sobre qué elementos forman realmente una relación de pareja y cómo podemos cultivarla de manera adecuada.
¿Qué factores contribuyen a este sentimiento que llamamos amor? ¿Y cuál es la forma más saludable de nutrirlo? Estos son interrogantes comunes que merecen nuestra atención y exploración. Te invito a adentrarnos juntos en este fascinante proceso, lleno de aprendizajes y descubrimientos, que sin duda alguna es vital para nuestras vidas y se conoce como vida en pareja.
Hoy hablaremos de:
Aspectos fundamentales en la relación de pareja
Cuando se trata de una relación de pareja, independientemente de cómo estén establecidos sus cimientos, ciertos principios como la igualdad, la reciprocidad y los intercambios positivos se destacan como pilares esenciales. Estos elementos no solo contribuyen a la construcción de una vida en pareja sólida, sino que también proporcionan flexibilidad frente a los desafíos que puedan surgir.
Una percepción positiva de estos intercambios, especialmente de los aspectos positivos, es clave para mantener la armonía en la relación. Cuando esta percepción falta, una de las partes puede sentir desequilibrio y desarrollar sentimientos de insatisfacción, lo que podría llevar a contemplar otras opciones fuera de la pareja.
Es importante reconocer que las parejas con necesidades terapéuticas a menudo experimentan una desconexión con estos elementos fundamentales, lo que puede generar desesperanza con respecto al futuro de la relación. Antes de embarcarse en una relación, es crucial explorar los intercambios reales entre los miembros, así como sus percepciones, expectativas y creencias sobre la pareja. En caso de distorsiones en la percepción, es necesario acompañar el proceso de reajuste y resignificación a través de la terapia de pareja.
Otro aspecto crucial para el mantenimiento de una relación de pareja saludable son las habilidades de comunicación y negociación. Estas habilidades son fundamentales para construir una realidad compartida y para revertir cualquier deterioro en la relación. A menudo, pequeños cambios en el lenguaje, como expresar las cosas de manera más amable o referirse a la pareja con afecto, pueden facilitar la comunicación y fortalecer la confianza. Esto, a su vez, hace que sea más probable el desarrollo de intercambios positivos y una percepción más constructiva del progreso de la relación de pareja.
¿Por qué importa el afecto en la relación de pareja?
Los aspectos afectivos juegan un papel fundamental en la durabilidad y la calidad de una relación de pareja, según la opinión unánime de los expertos. Estos aspectos suelen ser la base por la cual las parejas deciden estar juntas. Aunque experimentar emociones placenteras como la felicidad, el gusto y el deseo puede ser parte natural de una relación, estas experiencias no siempre son suficientes por sí solas. Sin un canal adecuado para expresar estas emociones, la pareja podría percibirlas como elementos aislados y carentes de significado.
La expresión emocional adecuada, especialmente al comunicar afectos positivos, fomenta una mayor proximidad personal y una relación más cálida y confiada. Además, promueve una actitud de aceptación hacia la pareja, lo que facilita la resolución de conflictos y fortalece la unión frente a los desafíos. Por el contrario, la falta de vínculos afectivos o una expresión emocional inadecuada pueden dar lugar a sentimientos de malestar, falta de aceptación y, en general, generar más problemas en la relación.
Cómo fortalecer la relación de pareja
Cuando se trata de relaciones afectivas, es crucial prestar atención tanto a la expresión de afectos positivos como a la reducción de los negativos. Manifestar afectos positivos juega un papel fundamental en la creación de una relación de pareja gratificante. Algunas formas recomendadas de expresar estos afectos incluyen gestos de cariño, apoyo emocional, reconocimiento de la valía de la pareja y compartir momentos especiales.
Además, es importante reconocer y abordar los afectos negativos en la relación. Estos suelen surgir cuando las expectativas de uno o ambos miembros no se cumplen. Identificar y gestionar estos aspectos negativos permite reorganizar la relación y promover acciones que fortalezcan la conexión y el desarrollo conjunto.
En última instancia, cultivar una relación de pareja saludable implica valorar tanto los aspectos positivos como los negativos, fomentando la empatía, la comprensión y el compromiso mutuo.
En el Consultorio Psicóloga María Paula, entendemos la importancia de orientar acciones que fomenten relaciones de pareja saludables. Nos sentimos comprometidos con la tarea de ayudar a parejas dispuestas a crecer juntas y construir un futuro compartido. Esta responsabilidad profesional nos impulsa a brindar lo mejor de nosotros en cada sesión, no solo guiando los procesos de manera ética y comprometida, sino también contribuyendo al tejido social.
Te invito a que te sumes a este proceso de acompañamiento desde ahora mismo. Permitámonos juntos ser la mejor versión de nosotros mismos, y así abrir la puerta hacia el verdadero éxito y crecimiento personal en nuestras relaciones de pareja.
Gracias por llegar hasta el final de este artículo que fue escrito por Julián, psicólogo especialista del Consultorio Psicológico María Paula, lo hice con cariño y entrega para ti, te dejo un video que te ayudará a conocer como convivir con tu pareja. Si te gustó, no olvides compartirnos y así llegar a más personas.
